lunes, 27 de septiembre de 2010

Tal vez no sea el día para escribir esto, tal vez no sea la hora, tal vez no sea el momento o es demasiado apresurado. Pero así es mi forma de ser, lo que está dando vueltas en mi mente tiene que salir de alguna manera, antes de que explote o empeore. No voy a escribir mucho sobre el tema y no voy a ser tampoco demasiado explícita, pero aún así necesito decirlo sin hacerlo.
Estoy teniendo second thoughts. Y no, no hay una traducción al castellano que encaje mejor que esas dos palabras en inglés. Porque está empezando a crecer lentamente la duda dentro de mí. Y no la duda de si está bien o si está mal o de si quiero intentarlo o no. No, no, no, esa ya la resolví. Esta es diferente, tiene que ver con lo que yo necesito y con lo que está a mi disposición. Con si quiero tomar lo que se me ofrece aunque haya un par de pequeñas cosillas que no me son muy agradables o no hacerlo y retirarme. Porque no da exigir nada a nadie en la situación en la que estoy y porque todavía estoy a tiempo de frenar y pedir cambio si quiero salir del partido. Entonces, ¿qué hacer? ¿Sigo jugando hasta que se termine o me saquen tarjeta roja o pido salir y dejo de jugar ahora?

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