jueves, 28 de octubre de 2010

Es el juego de las diez diferencias. Hoy agarré dos fotos de dos personas distintas para mostrárselas a una amiga. Dio la casualidad que las encontré a la vez y se las mostré a la vez. ¿Y qué pasó? Las dos personas eran físicamente iguales. Indistinguibles. Era difícil saber en qué se diferenciaban y era improbable pensar que no eran familiares. Y sin embargo no tienen nada que ver. O tal vez sí, sólo una cosa: una es una de las personas con las que estuve y la otra es la persona con la que me gustaría estar ahora. Mi viejo crush y mi nuevo crush.



Tengo problemas, ¿no?

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Sorry for my bad english. Thank you so much for your good post. Your post helped me in my college assignment, If you can provide me more details please email me.

Loohan dijo...

WTF? o.O