viernes, 11 de febrero de 2011

Vacaciones. Por fin esas amadas, deseadas, anheladas, esperadas, ansiadas, preciadas, adoradas, codiciadas, pretendidas, queridas, veneradas, idolatradas vacaciones. No, para nada, no estaba pendiente de ellas y tampoco veía la hora de tenerlas, casi como que esto no es ironía. Casi casi. Y ahora a disfrutar de mis primeras horas de alpedismo. ¡Dos semanitas de felicidad!





Y no, no tengo nada más interesante que decir, nada hoy es más importante que las vacas.

No hay comentarios: